Desde la antigüedad existe el deseo de clasificar los temperamentos distinguiendo entre ellos varios tipos definidos por determinadas relaciones entre lo físico y lo psíquico.
Los temperamentos humanos se pueden clasificar, según su aspecto físico, en cuatro grupos:
Nervioso
Suele ser delgado, de talla pequeña, frágil y de miembros cortos, su cráneo alargado en sentido horizontal presenta un marcado abultamiento occipital, asin como ensanchamiento de la región posterior.
La frente es alta y ancha con acentuada convexidad por encima de las sienes, el contorno del rostro visto de frente, adopta una forma triangular, el mentón es puntiagudo y de escaso volumen y la nariz de perfil convexo, más o menos saliente.
La boca pequeña de labios finos, con las comisuras en descenso y las orejas finas, delicadas, tiene muy buen oído y la tez es, generalmente muy pálida, los ojos afectados con frecuencia por miopía, son despiertos, inquietos y hundidos.
Sus cabellos son finos, su voz tiene timbre agudo, sus ademanes son bruscos, rápidos, irregulares y los gestos expresivos
Para calificar a una persona nerviosa no es preciso que presente todos los signos reseñados, sino que bastara registrar la presencia de ciertos números de los mismos.
Bilioso
Su rostro tiene el aspecto óseo, en las mandíbulas, pómulos, frente, cráneo, se manifiesta una angulosidad muy marcada, la frente suele ser ancha, menos sin embargo que los nerviosos.
Los ojos, negros o castaños, hundidos en la orbitas, las cejas horizontales, están separadas por arrugas verticales, la nariz de punta redonda, se dibuja convexa, la boca es grande de labios finos y contraídos, el mentón sólido y saliente, la mandíbula inferior, fuerte de dientes largos, las cejas rectangulares, las venas resaltan, la tez es amarilla obscura o mate y la piel seca.
Los ademanes rotundos, la voz firme, la expresión del rostro severa, con la mirada fija y ardiente que no se desvía, un signo característico en este tipo temperamental es la gran facilidad en que monta en cólera, a veces por las cosas mas triviales, pero su enfado no suele durar mucho tiempo.
Sanguíneo
Es ancho, rechoncho, su cuerpo, sus miembros, su cráneo, su rostro, todo en el se expande en el sentido de la anchura, tiene la tez clara y brillante, sus mejillas son típicas en estas personas, su frente es mediana, los ojos azules adoptan una expresión benévola y risueña, la nariz de perfil recto, puntiaguda, es demasiado alta, los abultados labios aparecen coloreados y la boca es grande, el mentón suele ser de tamaño mediano y redondo y la oreja de curvo perfil.
El sanguíneo frecuentemente acciona mientras habla.
Linfático
Es pesado, macizo y recio, su carne fofa parece saturada de agua, también su rostro ancho y graso, se muestra habitualmente inexpresivo, es rubio, pelirrojo o castaño, de tez pálida, blanco y de ademanes blandos y lentos.
Camina con indolencia, su mandíbula inferior esta muy desarrollada y el cráneo presenta amplias convexidades, el mentón un poco retraído y rodeado de grasa, los ojos lacrimosos y algo salientes con los parpados caídos y pestañas largas, de mirada desviada, aunque sus pupilas estén a menudo dilatadas, los labios gruesos y abultados, su voz acostumbra a ser lánguida y monótona.
