Pocas son las personas que tienen la habilidad de saber extraer provecho, culturalmente hablando, de lo que dicen los demás, ello es importante para adquirir facilidad de expresión.
El modo de escuchar, en el que se debería de ejercitar, para mejorar los medios de expresión consiste, no en una atención pasiva, meramente realizada con los oídos, sino que debe procurar captar y analizar lo que esta oyendo, de manera que se verifique una verdadera asimilación.
Esta forma activa de escuchar reporta dos clases de beneficios, por un lado disponer de un medio estupendo de compresión y apreciación de las opiniones de los demás, con objeto de poder hablar en su mismo nivel y por otro lado la atención activa de las personas que se distingue por la facilidad y elocuencia de su verbo, de esa manera aumentamos nuestras capacidades de compresión y expresión.
Por tanto, hay que saber escuchar, sabiendo escuchar es como mas se aprende, se es receptivo, los buenos escuchadores son personas muy apreciadas, por aquellos que necesitan intimidarse o desahogar sus problemas, si quieres que te comprenda debes aprender primero tu a comprender a los demás, muchas veces el hecho de escuchar le aportas una gran ayuda a tu interlocutor y una persona que habla y habla y no escucha, terminara no sabiendo de que habla, para saber de lo que se esta hablando hay que prestar atención de lo que se escucha.
Se cuenta que una vez, Sócrates dijo a un joven que pretendía ser su alumno:
Socrates- ¡a usted le pediré doble precio!.
Alumno- ¿porque?.
Socrates- ¡porque es un charlatán (explico el maestro), y tendré que fatigarme el doble para enseñarle a hablar, pero antes de todo, debo enseñarle a callar.
Mejorando tu capacidad de escuchar
